Carta abierta por la libertad de Gorky. (Llegué Tarde)

¡La intención muy buena!, ¡estupenda!, luchar por la libertad, sea la sociedad que sea, es una de las mejores maneras de reconciliar nuestra alma, siempre y cuando nuestro objetivo sea global y no personal.
Personalmente yo conozco a Gorky, compartí opiniones, saludos, escenario y hasta reuniones de “rokeros” en cuba, yo, como muchos otros que firman aquí, estoy mas comprometido con la persona que está entre rejas que como defensor de su música, por eso firmo y a la vez no deja de llamarme la atención que haya causado tanto furor algo “nada fuera de lo común” para el modus operandi de los que ponen las reglas en el sistema político en cuba, ahora todos los que lean esto me dan a tildar de no sé cuantas cosas incluyendo hp, comemierda, envidioso y hasta , por que no!, enviado del sistema, piensen los que sea, para mi la razón en si esta mal de principio, una opinión personal no debe convertirse en bandera de lucha si de verdad no sabemos o no nos empapamos del problema, las cosas en la isla no se resuelven pidiendo la libertad de Gorky a un Pablo Milanes que tiene un concierto en la Tribuna antiimperialista, están escuchando?: “la tribuna antiimperialista” ¿se creen ustedes que va a salir alguno de sus invitados a interceder por Gorky? O vamos a pedirle a ellos que alcen un telón de fondo preguntando por Gorky como lo utilizó la banda Escape en la película Habana Blues preguntando por Maria -la del patio-, la misma película donde Gorky aparece representado por un doble por estar preso en ese momento ¿sabia alguien eso?, la película Salió y nadie que la vio, mas allá del sistema que gira –como órbita- alrededor del rock cubano, se enteró de que este “Punk” estuvo “guardado” por largo rato, y todo esto ( hablando de la prisión) después de un festival de rock en pinar del río, nadie, absolutamente nadie en el terruño salió en su defensa y las instituciones cubanas, a las cuales pertenecen Los Aldeanos o David Blanco(nombre que de verdad no se que hace ahí) y que supuestamente se les podría enviar la “misiva”, sin olvidar ante todo, la asociación hermanos saíz a la que perteneció Gorky, le dieron la espalda y todos se limpiaron el pecho con el asunto por no tener los argumentos necesarios y (o) por no meterse en candela con el “panadero”.
El Gorky aguantó callao, o no, y no obstante a las advertencias resurgió dispuesto a joder el mundo que se le enfrentaba pues en resumidas nada cambiaria, entonces, para que perder el tiempo en enviar cartas si estas personas, de llegarles algo al respecto, no van a meter la mano para no chamuscarse, ahora, no quisiera meter a todos en la misma olla pero hay cosas que se pasan de castaño a oscuro, no nos creamos que los que pueden estando dentro harán algo al respecto - ojalá me equivoque pero si pasara les pido me lo dejen saber – pero sé, por experiencia propia, que los que están en la “vorágine” no mueven un dedo para no caerse al chocar contra el muro de la realidad virtual, surrealismo o realismo socialista, como quieran llamarle, que se ha inventado la isla y los que han tratado de hacer algo contra de eso andan borrados o ya no están dentro de cuba, y se lo han dejado saber muy bien a los que quedan, por eso se cuidan tanto.
Gorky está ahí por pertenecer, quizás, a un ultimo reducto de irreverentes contra todo que deambula por las calles habaneras, pero que a la vez ha tenido “la suerte” de tener una persona que desde que “arrancó su desgracia”, hace ya unos años, se ha dedicado a divulgarlo por el mundo, cosa que también aplaudo pero cuantos otros hay, como el, extirpados como canceres de los círculos artísticos cubanos que no tiene ni siquiera un Email para comunicarse? de sus irreverencia en la música mejor no hablemos, no viene al caso, el está preso ahora por que se la engancharon y la sociedad también le dio la espalda, pues el vecino, la radio, la TV, el taxista y las Sagradas instituciones culturales del país decidieron crucificarlo y con eso le engancharon también la gloria , ahora todos estamos sumidos en esta carta con destinatarios sin sentido, ¿se acuerdan de la carta de los intelectuales? ¿Qué pasó con ello?
Lo lamento por Gorky, la persona que él es no se merece esto, como no lo merece los cubanos, y el firmar para mi, mas allá del músico o del rokero, lo estoy viendo como el no dejar que se termine el ajusticiamiento a la libertad que ya no vamos a tener ya nunca en cuba.

Arbol que nace torcido: para consumo nacional

"Mijo y si es mas grande que tú le das con un palo…” esta es la famosa recomendación que empezamos a escuchar desde muy pequeños en la casa luego de, explicarle a los mayores, que habíamos tenido algún altercado en la escuela o la calle. por lo menos así era en el pueblo donde nací para hoy, al escribirlo, entender que la expresión en si, más allá de ser un refrán o representación sin sentido, se ha posesionado, hace mucho, de esa filosofía corporal a la que, los cubanos, estamos expuestos casi de manera subconsciente cuando bautizamos con gran parte de indocilidad y (o) naturaleza cada paso nuestro por la vida. Esta mañana mientras veía los juegos olímpicos en un canal canadiense, me he quedado atónito al ver, como nota discordante entre tanta amabilidad y “organización”, a un deportista cubano que, ante la frustración de saberse sin la medalla en su pecho (si esto lo tengo gana’o por que me lo quitan-diría el) repartía patadas y puños al referee y otros jueces de su deporte. Inclusive yo, como buen cubano según mi criterio, por algunos segundos le había encontrado un poco de razón a esta manera de “resolver el problema” como de igual manera, en un periodo de tiempo mas corto que el "trompón", me sentía mal al verme reflejado, como en espejo de bruja de blanca nieves, en ese modo de hacerle entender al contrario cuando no queda verbo posible. Para bien o para mal los cubanos, como siempre, estamos acostumbrados a dar la nota; por años esa frustración, que es cotidiano para muchos, las desembocamos en golpes si ya las evidencias o las palabras, no funcionan, esa es nuestra "traspolación" de aquello que aprendimos a usar tan bien en el barrio, la escuela, la pipa de cerveza, los amores o hasta en el deporte, el mismo deporte que hoy no bastaba con su violencia en sí como para tener que ponerle el realismo de película "R" y dejar claro para todos, pues inclusive hay quien lo aplaude, que nosotros si tenemos la razón sin dejar que lo que realmente nos presiona salga a flote.
Se acaban los juegos y ya no tenemos todas aquella medallas y triunfos que por años nos acompañaban ¿Va el deporte cubano “cuesta abajo en su rodada”? No, solo creo que está ocupando el lugar que siempre le perteneció dejando a un lado todas esa ínfulas y nacionalismo barato con que lo han forrado, somos una islita -con muy buenos deportistas- pero ya es tiempo para dejar de creemos el ombligo del mundo si en resumidas estos deportistas, mortales de carne y hueso, que representan a la isla no hacen otra cosa que eso: prepararse para las competencias y poder poner muy en alto, según las consignas, el “nombre de la patria”, ahí veo yo la verdadera razón del fracaso. hace mucho el deporte revolucionario perdió la inocencia y la soberanía del disfrute para transformarse en presión política que aflora ya por años y tener que dedicarle cada medalla o victoria “al comandante”,si, hay que ofrendarle la medalla a "papá" pues la familia que te crió, el vecino que te apoyó o el entrenador que se sacrificó a la par tuya no vale nada, el compromiso primero y los sentimientos después, eh ahí que, ahora, cuando la derrota los encierra y sufrimos –yo también lo hago pues nunca dejaré de sentir como isleño- entendemos que no hay peor contrincante que la presión que no nos deja controlar nuestros impulsos cuando otros deportistas del mundo, que pueden ser reclutas, universitarios o voluntarios, nos vencen en una contienda en la que el arbitro no está de nuestro lado ¿habríamos hecho lo mismo con una situación al contrario y a favor nuestro? El deporte cubano, por suerte, no está perdido, solo tiene que despojarse del compromiso con el absoluto y convertirlo nuevamente en un sentimiento de agradecimiento a los que lo forjaron o a los que esperan tu incursión con medallas o sin ellas, el rival no es el enemigo, el enemigo somos nosotros mismos cuando no nos queda otra salida que la violencia para desembocar tanto odio que llevamos dentro. Todo tiene arreglo, inclusive esto, siempre y cuando seamos sinceros y dejemos de pensar que somos los mejores del mundo o que todos nos quieren dar “la mala”, ese día disfrutaremos el deporte nuevamente sin lamentos y, creo, es lo que todos nos merecemos.
A. Valdés

El cuñito del Minrex, la fábula

Existía en una comarca un cuñito que creció sabiéndose el más importante del lugar, sin él, ningún pliego que se sacara de sus predios valía un céntimo. Por eso, los labriegos, hacían largas filas, inclusive durante la madrugada, para que se grabasen sus pertenencias con el troquel, en muchas aldeas se comentaba de la importancia de ésta impresión en el mundo exterior y por eso, aunque no había decreto real sobre ello, todos pagaban su diezmo.
Un día un mercader que había logrado regresar después de largo tiempo fuera, contaba que todos en otros reinos se burlaban de el al ver sus edictos marcados con una huella que nadie sabia para que servia pero nadie en la aldehuela fue capaz de creerle, por lo contrario, siguieron haciendo largas filas durante días para celebrar y reverenciar esa señal en tinta encima suyo, lo que, según ellos mismos, los salvaría de ser despreciados en otros lugares mientras el cuño sucumbía de la risa.
Moraleja:
Que moraleja? Esto no tiene moraleja.
Hoy he estado revisando todos estos cajones con papeles y certificaciones, traídas de cuba y, que por razones que nadie puede explicar, guardamos como reliquia en lo más recóndito de nuestros armarios, para encontrar en cuatro de los documentos una sola cosa en común: el cuñito del Minrex. Hoy al cabo de unos cuantos años todavía no le encuentro sentido a esto, a lo mejor y es que nunca lo tuvo pero yo no tenía otra opción, de hecho nunca, en lo que a mí respecta, el famoso cuño me sirvió de nada excepto en el poder disparar mis preocupaciones semanas antes de mi salida de la isla. Los que salieron, como yo, después del 2000 se pueden acordar, si es que la rabia no les ha bloqueado esa parte de la memoria grafica, como otras personas nos decían que para irse de cuba había que certificar el titulo, la inscripción de nacimiento y todo lo demás posible para que nos sirviera en el extranjero. Recuerdo también haber hecho cola y haber comprado turnos de contrabando durante una madrugada frente a la oficina del Minrex en G para al día siguiente, y siendo el último suertudo del día, haber pagado unos dólares, no recuerdo cuantos, por el cuño en mis papeles dejando atrás una larga cola que unía en una sola a despistados, necesitados y vendedores, también recuerdo haber visto lagrimas en algunas caras. Hoy me he dado cuenta de que el cuñito no me sirvió de nada, a mi certificación de nacimiento, mi titulo o mis antecedentes nunca los miraron por detrás, pero ya no contaban los dólares y pesos cubanos que gaste en ello, en resumidas yo tampoco sabia si era verdad lo que me decían pero había que hacerlo “por si las moscas”
Moraleja:?
Y dale con la moraleja!!!!!!

A.Valdés

13 y 8 son 21

A raíz de una entrevista A Raúl Ciro publicada por el Weblog Efory Atocha (muy bueno por cierto) y por esas cosas que pasan en la vida, muchas de ellas sin uno proponérselo, publico, de manera mas amplia, mi opinión y respuesta al encontronazo cibernético de compatriotas que se dejan llevar por el momento. (Ojo, de no saber a quien se refiere la entrevista, recomiendo leerla primero aquí)
Sin entrar en parcialidades (por pedido expreso del entrevistado) creo que apartando mi admiración por Raúl Ciro, persona con la cual he tenido mas de un momento de interrelación en el aspecto musical, y al que respeto como ser humano -uniendo sus virtudes y defectos-, me parece valedero haber tocado, aun solo con uno de sus participes -en este caso Ciro- una vertiente de la música cubana que menos concesiones ha hecho no obstante a no disfrutar de la suerte que se “merece”. El verdadero rock latino cubano, que si existe como existen lo que lo sufren, lleva una buena cantidad de años concibiéndose para al final tener que renunciar y salir (los que pueden) de la isla a acompañar a “otros” con más nombre en ese afán por llegar al “sitio”, podríamos rezar que nadie es profeta en sus tierra eh!! Yo mismo, que en algún momento fui parte de algo tan bonito como demoledor en cuba, y estoy hablando del cansado movimiento de rock que se codeaba al mismo tiempo con la novísima trova ( definición que se ganó únicamente para enmarcar una época ) se de los infinitos deseos de hacer algo diferente- en lo cual Raúl era cabecilla-, como se también que no importan las razones, todas son buenas y justificables, por las que hayamos llegado “del otro lado” pues lo que importa es la obra y para ese tiempo ya Raúl Ciro había alcanzado conectarse, al igual que superávit había hecho anteriormente, con un sonido tan peculiar que muchos, que ahora tratan de darle la patá’ a la lata en cuba, pagarían por encintarlo. De ahí que crea que cualquier persona votaría 100 a 0 por “mi ritmo caliente” de superávit, de haber sido comercializada con decoro, en lugar de la versión de “negra tomaza” de los caimanes, perdón, quise decir los Caifanes (esto es punto y aparte)
Sobre el tema “comentarios al respecto”, se que deberíamos respetar profundamente todas las opiniones que, para bien o para mal, se generan pues, humanos somos y trabajamos por pares opuestos –y esto no lo inventé yo eh!- por eso a momentos nos es difícil “enchufarnos” con determinado estilo o jerga popular, aunque personalmente no creo que nuestra generación sea la que mas haya acabado con el idioma, y por ello sin ser el protagonista de la conversación, y sabiendo lo difícil que puede llegar a ser hablar de algo que ha sido tu sueño y que nos has logrado trascender pues el medio no te lo permite, utilicé el mas puro estilo “cumanayaguense” para batear uno de los comentarios publicado con nombre y apellidos, lo cual también es de respetar. Ahora con la cabeza mas fría, estoy de acuerdo con que mi respuesta, como el mismo comentario que la generaba, estaban fuera del tema que nos unía, lo importante no era coger como pedestal el idioma como justificación o la justificación como importante para rebatir, todos tenemos nuestros momentos y todos ellos son validos, soy de los que creo que sacar todo esto que llevamos o pensamos en un momento nos hace mejores, pues es la tranquilidad del alma lo que nos hace poder disfrutar de los remanentes de buena música que nos acompañó hace años llámese Ciro3C, habana oculta o guitarra rota, inclusive es lo que nos hace entender, en este caso a mi, que si, que en esa respuesta hay mucho de verdad necesaria pues la vida tiene muchas aristas y la grandeza del hombre está en poder tomar lo que creemos bueno de cada hecho. Estimado David Lago, mis respetos. Chago: muchas gracias por la oportunidad. Raúl: gracias por tu música ( no importa que no seamos estrellas verdad? Al final- y dale de nuevo con eso- todos seguimos siendo cubanos

A. Valdés